Demócratas y cristianos en caída libre

Recuerdo cuando yo era pequeño y el país estaba siendo liberado, por así decirlo, aunque no haya sido tan así , durante los años noventa, de un proceso bastante conflictivo y conocido por todos, que no tienes sentido volver a nombrar y a traerlo al presente.
Es inolvidable, para los recuerdos de mis primeros años de existencia, sin dejar por entendido una buena o mala cara, la repartición masiva de esos afiches, y la movilización de esos carros que hacían propaganda tan llamativa, cosa nunca antes oída por mí. Muchos creen que yo no soy, o no habría sido, capaz de recordar sustancia alguna de esos años, pero, al parecer, mi memoria infantil es muy buena, y a veces hasta mejor que la de estos años. Aquella publicidad política, era la del partido de los soñadores por la democracia con principios católicos, los dueños de un partido que se hacía cada vez más fuerte y unido, cosa que con el tiempo se ha ido dejando de lado, no sólo en éste caso, sino, en la generalidad de los partidos y las elecciones sociales de las nuevas personas; ahora los jóvenes no votan, no se ven para nada interesados, porque sus intereses, entendiblemente, en ciertos casos, van por las ramas de otro tipo de desenvolvimientos.
Antiguamente, mi padre, que ahora es un fallecido, era uno de esos soñadores en la igualdad, la creencia y la unión nacional... un partidario demócrata cristiano.

Dentro del partido de derecha, aunque todos hablen de la Concertación izquierdista, y sin duda, que para mí, en la actualidad, todos los partidos políticos en Chile me parezcan con raíces tan ligadas a la derecha, por hechos de tratados de comercio o relaciones publicas, campañas y alianzas vulgares, desligando al partido comunista, con mayor densidad provocan el aumento de la clase alta y la clase baja, producto de ciertos mecanismos, muy necesarios para el crecimiento como país, dentro de estas épocas tan globalizadas y monopolizadas, en todo el sentido de la palabra; mientras todo esto sucede, se presenta, dentro de la DC, a una oveja negra y a una reina de fundo; dos personajes, que tienen la característica de ser líderes naturales, a cualquier parte que vayan. Han cruzado más de una discusión, creando así, un conflicto interno y nacional en el ámbito de la política.
Por un lado, está la oveja Zaldivar, que siempre a tenido ciertos aires de grandeza, con una notoria intención por ser líder de la bancada. Con sus pensamientos, en ocasiones, más derechistas de lo permitido, y con postulados que últimamente han ido en contra de la presidenta del partido, creando una crisis interna, conocida por los medios de prensa, quienes se lo han publicado a la gente. Se resguarda, nuestra oveja negra, al decir, que no se le permite el libre pensar, sobre lo que él entiende como democracia... dice no pensar en intereses personales, sino, en los intereses de la gente de clase media, como siempre lo ha dictado la clásica agrupación del partido.
Por el otro lado, está nuestra reina de fundo... Alvear, que se bajó en las elecciones pasadas para las presidenciales, dejando el camino libre a la actual presidenta de la república. Ella es la presidenta de la DC, por consecuencia, representante de toda la comunidad, y las actitudes repetidas,y dichos, de la oveja negra, le han parecido una falta de respeto ante todo el partido, desde los más jóvenes a los más antiguos partidarios. No vamos a permitir sus bajezas, partidarias de otras agrupaciones más ligadas a él, porque nuestra casa no juega al mismo juego.

Ahora es el momento en que los miembros van a dar su apoyo, y todo el cariño mentiroso, a quien más los represente de los dos, buscando la publicidad personal y gratuita, con visitas televisadas, a las casas de ambos contendores, creando la crisis y separación. Muchos dicen que esto no quiebra el poderío, que la situación ya ha sido solucionada, y otros dicen que es el comienzo del fin... usted deberá ver a quién abrazar.